EL TAN MENCIONADO EGO

El ego, palabra latina que significa “yo”, desde el punto de vista psicológico es la instancia de nuestra psique que se reconoce como un ser especial, individual, separado del resto. Sería la parte de nosotros mismos que media entre el ello (niño) y el superego (padre)y se encarga de adaptarse al medio entre los deseos caprichosos del niño y los valores impuestos de la sociedad. Por lo tanto todos debemos contar  con ese equilibrio que nos podría otorgar el Ego.
A mi punto de vista este sería el proceso inicial de la madurez del ser humano. Primero reconocernos como individuos ( separarnos de padre-madre) para luego, Y este es el concepto espiritual, aceptar que no somos ni más ni menos que nadie y que en realidad SOMOS UNO con toda la humanidad. Este es un concepto mucho  más avanzado, maduro y espiritual de nuestra realidad.
Una persona con demasiado Ego es una persona que se sobre estima. Se compara y se siente genuinamente mejor que los demás. Su ego le impide reconocer que se ha equivocado y es incapaz de disculparse.
Además  están los conceptos de EGOLATRA,( la artista María Félix de México)   que vendría a ser la persona que tiene un amor exagerado a sí misma; luego podríamos comentar la palabra EGOISTA, que sería la persona que solo piensa en su interés y no le preocupa el de las personas de su entorno.
¿Qué tipo de ego tengo?
Sin embargo, en un plano espiritual, el excesivo ego o la conciencia individual perjudicarían el crecimiento personal pues ni se entera que existe una conciencia universal. Algo así como “un tapón que impide la ascensión de la mente a los estados superconscientes”, afirma el investigador, Iván Durán Garlick, autor del libro “El Ego". Agrega que la mente de una persona con poca conciencia es un hotel cinco estrellas para el ego. Entonces, indica que para evolucionar es necesario conocer qué tipo de ego predomina en la personalidad y trabajarlo. 
Para adentrarse en ese conocimiento, invita a revisar estas categorías y enterarse en qué clasificación se encuentra. 
Ego SABELOTODO: Es aquel ego que siempre cree tener la razón, le gusta dar consejos sobre todo, siempre contesta aunque no sepa, cree tener respuesta para todo, no se puede quedar callado. 
Ego INSACIABLE: Es el ego “centro de mesa”, no le gusta pasar desapercibido, hace cualquier cosa para llamar la atención. 
Ego INTERRUPTOR: Su necesidad de auto-referencia es tan fuerte que interrumpe permanentemente, nunca deja que los otros terminen de hablar. 
Ego ENVIDIOSO: Es el que no soporta los triunfos y éxitos de otros. Degrada a los que cree que son mejores que él. 
Ego PRESTIGIOSO: Es el ego que busca aplausos, reconocimiento y admiración en todo lo que hace. Siempre quiere ser el mejor. Frecuentemente les dice a los demás: “te lo advertí”, “yo sabía”, “te lo dije, pero tú nunca me escuchas”, etc. 
Ego JINETE: Se monta de lo que dicen otros. Se aprovecha de los datos de los demás para su propio beneficio. Saca partido de lo que otros dicen para estructurar sus propias intervenciones. Es copión y usurpador. 
Ego SORDO: Nunca escucha, le gusta hablar sólo él, habitualmente finge escuchar. 
Ego MANIPULADOR: Es aquel ego astuto que siempre se las arregla, ya sea tergiversando, acomodando, engañando, mintiendo o justificando para que las cosas resulten siempre a su favor. 
Ego ORGULLOSO: Es aquel ego competitivo, discutidor, que no le gusta perder. 

Ego PREMENTAL (silencioso): Es aquel ego que calladamente tiene un discurso paralelo, es criticón, hipócrita y enjuiciador. 

Comentarios

Entradas populares