QUIEN DIJO QUE LA CONVERSACIÓN NO ES TERAPÉUTICA?


Depende de con quién la sostengas. Tener una conversación con una amiga a veces puede ser de gran ayuda. No se pueden desestimar esas  ocasiones. Pero también pueden confundirte aún mas de lo que te encuentras.
En cambio tenerla con una persona preparada y con experiencia para sostenerte y ayudarte a que tomes decisiones adecuadas puede ayudarte a que te ahorres mucho tiempo de incertidumbre.
Hay algunos que cuando la sesión con el psicólogo se convierte en una conversación sienten que mejor hubieran estado con una amiga. Numerosas ocasiones he tenido que postergar ejercicios o protocolos terapéuticos por darle paso a la conversación por que mi paciente necesita desfogarse y ordenarse y a mi me toca escuchar atentamente, enfocarlo, abrirle ventanas de posibilidades, alertarlo de posibles problemas y confusiones de conceptos, hacerles las preguntas correctas que promuevan la reflexión. Cuidarlos de si mismos, muchas veces.
No todos los que llegan a una consulta psicológica quieren tomar decisiones, puede que necesiten comprender alguna situación familiar, laboral o social, otros quieren superar debilidades de carácter o personalidad, otros buscan desarrollo personal, superar duelos o relaciones de pareja, etc. Se crea, entonces, una relación muy transparente, así como un espacio de protección y respeto, donde el beneficiario puede comprender mejor la situación, conocerse profundamente a sí mismo y saber qué es lo que quiere realmente y cómo lograrlo.
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